El moho aparece en lugares donde hay excesiva humedad. En zonas de la casa como la cocina o el baño es común que aparezca en las paredes a causa del vapor de agua que se genera al cocinar, ducharnos, el uso de calefactores… Cuando este vapor no encuentra una salida, se condensa sobre las superficies, lo que propicia la aparición de hongos y moho.
Eliminar el moho de las paredes es importante no solo por una cuestión estética, sino porque puede afectar a nuestra salud, ya que puede provocar asma, tos e incluso bronquitis.
En este artículo te mostramos cómo puedes acabar con el moho de las paredes así como trucos y consejos para evitar su aparición.
¿Qué vamos a ver?
- Remedios caseros para quitar el moho de las paredes.
- Quitar moho de las paredes con lejía.
- Agua oxigenada para quitar el moho de las paredes.
- Cómo limpiar el moho de la pared con amoniaco.
- Consejos para evitar que salga el moho en las paredes.
Remedios caseros para quitar el moho de las paredes.
A la hora de quitar el moho de las paredes, los remedios caseros son una gran alternativa, especialmente en casos cotidianos donde el problema de humedad no es demasiado grave. Además, son productos que solemos tener por casa, muy económicos, seguros y fáciles de usar.
Limpiar el moho de las paredes con vinagre.
Ya hemos hablado en numerosas ocasiones de la efectividad del uso del vinagre a la hora de limpiar: elimina malos olores, la cal, repele insectos, limpia y abrillanta los cristales, desatasca desagües… En este caso, nos toca hablar de su capacidad para eliminar las manchas de humedad de las paredes.
Para utilizarlo tan solo deberás rociar, con ayuda de un pulverizador, un poco de vinagre blanco sobre las manchas de humedad de la pared, esperar al menos unos 30 minutos hasta que haga efecto y, finalmente, frotar con un cepillo para eliminar el moho.
Debes tener en cuenta que esta opción va a suponer que la habitación en la que lo apliques quedará oliendo a vinagre durante unas horas, por lo que te recomendamos que ventiles bien la zona durante el proceso.
Árbol de té para quitar las manchas de moho
El árbol de té es un aceite antifúngico, antiséptico y antimicrobiano muy conocido que se usa, entre otras cosas, para tratar infecciones por hongos. Para eliminar el moho de las paredes sigue estos sencillos pasos:
- Mezcla 250 ml. de agua con una cucharada de aceite de árbol de té.
- Vierte la mezcla en un pulverizador y agítalo para que se integren ambos componentes.
- Pulveriza todas las manchas de humedad y deja actuar al menos media hora.
- Frota enérgicamente con un cepillo.
- Limpia y seca la pared.
Esta mezcla también se puede utilizar como medida preventiva en zonas con mucha humedad como la ducha, para prevenir que aparezca el moho.
Limpiar manchas de moho en la pared con bicarbonato
El bicarbonato se usa en labores de limpieza generalmente para eliminar depósitos de grasa y mugre, pero además sirve para desatascar, abrillantar superficies y posee propiedades blanqueadoras, por lo que va muy bien para limpiar manchas de moho en la pared.
Para utilizarlo tan solo deberás seguir estos sencillos pasos:
- Mezcla el bicarbonato con un poco de agua hasta conseguir una pasta.
- Con ayuda de un cepillo frota la pasta preparada por todas las manchas de humedad y moho que tengas en las paredes. Puedes ayudarte de un cepillo de dientes para llegar a las esquinas y zonas más pequeñas.
- Espera unos minutos hasta que el bicarbonato haga su efecto.
- Retira con un paño húmedo toda la suciedad removida.
Quitar moho de las paredes con lejía
La lejía es uno de los productos de limpieza más usados para limpiar las manchas de humedad y moho de las paredes por sus excelentes resultados. Además, es un producto muy económico y muy fácil de conseguir en supermercados.
- Realiza una mezcla de 400 ml. de agua y 200 ml. de lejía de uso doméstico.
- Vierte la mezcla en un pulverizador y rocía toda la zona de la pared en la que tengas moho y humedad.
- Frota con ayuda de una esponja o estropajo suave para no dañar la pintura de la pared y, finalmente, retira con un paño húmedo.
Agua oxigenada para quitar la humedad de las paredes.
El agua oxigenada es conocida por su efectividad para eliminar manchas de tinta, sangre, vino o sudor de la ropa.
Además, al poseer propiedades antisépticas, desinfectantes y antimicrobianas, es muy efectivo para eliminar bacterias, levaduras y hongos de las superficies como encimeras, azulejos, grifos, mamparas… Es un buen producto también para limpiar electrodomésticos que generan mal olor como las neveras.
Para eliminar las manchas de humedad en las paredes es muy efectivo y fácil de usar. Tan solo deberás rociar un poco de peróxido de hidrógeno o agua oxigenada al 3% sobre las zonas con moho, deja actuar unos minutos y retira con un paño húmedo.
Cómo limpiar el moho de la pared con amoníaco.
El amoníaco es comúnmente utilizado en las labores de limpieza para ablandar la suciedad en hornos y microondas, limpiar cristales, espejos, acero inoxidable y otras superficies. Funciona muy bien, además, para eliminar malos olores, manchas de alfombras y tapicerías y como desengrasante.
Su único inconveniente es el fuerte olor que desprende, por ello, te recomendamos que utilices un detergente amoniacal perfumado para que la estancia quede oliendo agradablemente después de la limpieza.
Para quitar el moho de las paredes con amoníaco, tan solo deberás:
- Realizar una mezcla de amoníaco o detergente amoniacal con agua.
- Rociar la mezcla, con ayuda de un pulverizador, por las zonas manchadas con moho.
- Remover con una esponja.
- Aclarar con un paño húmedo.
Consejos para evitar que salga el moho en las paredes
Hemos visto que limpiar el moho y acabar con las manchas de humedad de las paredes no es imposible y, además, es una tarea bastante sencilla. No obstante, siempre será mejor evitar que aparezcan. Para ello te damos los siguientes consejos:
- La ducha y el baño son zonas muy propensas a la aparición del moho por ser muy húmedas. Para evitarlo, se recomienda secar bien la ducha después de cada uso y, a ser posible, mantener ventilado el baño a través de ventanas.
- Permitir que corra el aire abriendo puertas y ventanas todos los días es primordial para evitar la aparición de humedades.
- También es muy efectivo el uso de deshumificadores para controlar la humedad excesiva en las estancias.
- En zonas con mucha humedad, también se puede optar por utilizar pinturas antimoho para las paredes.
- No guardes la ropa ni el calzado cuando aún estén húmedos.
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